Organización católica construye nueva ciudad para cristianos pobres de Pakistán

La 'Sociedad para el Desarrollo Humano', promovida por los sacerdotes Bonnie Mendes y Simon Khursheed, construye una nueva ciudad para alojar a los cristianos pobres que trabajan en los hornos de ladrillos y las personas sin hogar en la aldea de Mureedwala, distrito de Toba Tek Singh, en Punjab. «En la fabricación de ladrillos apenas ganamos el pan para nuestros hijos, ¿cómo vamos a comprar siquiera un pequeño pedazo de tierra?», sostuvo Nasreen Bibi, una de las beneficiarias.

Organización católica construye nueva

La organización católica ‘Sociedad para el Desarrollo Humano’, promovida por los sacerdotes Bonnie Mendes y Simon Khursheed, construye una nueva ciudad para alojar a los cristianos pobres que trabajan en los hornos de ladrillos y las personas sin hogar en la aldea de Mureedwala, distrito de Toba Tek Singh, en Punjab, Pakistán. La entidad ya trabajaba para ayudar a las personas a obtener su documento de identidad nacional, luego su tarjeta de seguro social e incluso también que tengan un aumento de sueldo. Bonnie Town, la «ciudad de Bonnie», lleva el nombre de su fundador, el padre Bonnie Mendes.

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El proyecto comenzó en 2022, cuando la Sociedad para el Desarrollo Humano compró un terreno de 5 acres en Mureedwala para construir casas para cristianos pobres que se adjudicarían gratuitamente. Ese año se construyeron 34 casas, en las que residen otras tantas familias. Ya hay 20 casas nuevas, pero la organización católica, que construye la nueva ciudad para los cristianos pobres, pretende edificar 80 para fin de año, cuando se hayan comprado otros 6 acres de tierra. «En este momento tenemos 11 hectáreas pero estamos tratando de obtener fondos para comprar otras 14 hectáreas y llegar por lo menos a 25 hectáreas, con la posibilidad de que se construya una parroquia», indicó el padre Simon Khursheed, presidente de la ‘Sociedad para el Desarrollo Humano’.

«Queremos construir 500 casas, una nueva iglesia, una escuela, un dispensario médico gratuito y un centro de formación para mujeres. Debo apelar al pueblo de Dios para que nos apoye en esta noble causa porque en el futuro Bonnie Town será un modelo para otras organizaciones que trabajan para mejorar la vida de los pobres», afirmó. «En la fabricación de ladrillos apenas ganamos el pan para nuestros hijos, ¿cómo vamos a comprar siquiera un pequeño pedazo de tierra?», sostuvo Nasreen Bibi, una de las beneficiarias. «Solo veíamos una casa propia en nuestros sueños, pero damos gracias a Dios por el padre Bonnie y por esta gran iniciativa. Ahora vivimos en casas nuevas sin costo alguno, es realmente un milagro en nuestras vidas», destacó.

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