Desconocidos secuestran al padre Antoine Macaire Christian Noah, un sacerdote católico de la Delegación Independiente de las Antillas de los Misioneros Claretianos, cuando se dirigía a su comunidad misionera en Kazal, a unos 34 kilómetros al norte de Puerto Príncipe, la capital de Haití, el martes 7 de febrero por la mañana. El presbítero es originario de Camerún y desde hace un año es vicario parroquial en la parroquia San Miguel Arcángel de Kazal.
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Los claretianos indicaron que los captores del padre Antoine se pusieron en contacto «con el superior de su comunidad misionera pidiendo dinero a cambio de su liberación». «Solicitamos a todos que se unan en oración para que el padre Antoine sea librado sano y salvo», indicó el texto difundido por la congregación del sacerdote católico que secuestran en Haití, que fue firmado por el padre Fausto Cruz Rosa, superior mayor de la Delegación de Antillas.
#Haiti – Il 7 febbraio il missionario clarettiano P. Antoine Macaire Christian Noah è stato rapito mentre si dirigeva verso la sua comunità di #Kazal. Padre Antoine, originario del #Camerun, è vicario nella parrocchia di S. Michele Arcangelo. #ACSitalia chiede preghiere! pic.twitter.com/m3DfuMBYMB
— ACS-Italia (@acs_italia) February 9, 2023
En diciembre de 2022, un sacerdote camilo explicó que actualmente son las bandas armadas las que dirigen el país, como también las que atacan escuelas y hospitales católicos. El padre Antonio Menegón aseveró que en Haití hay violencia «sin precedentes». «Los jóvenes violentos destruyeron, saquearon y quemaron depósitos de combustible, así como supermercados, iglesias, depósitos de alimentos de Caritas y otras organizaciones humanitarias internacionales. Los hospitales, uno tras otro, están cerrando por falta de combustible, electricidad, alimentos y medicinas», denunció.
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