Los miembros de Christians Solidarity Worldwide (CSW), una fundación de derechos humanos con sede en el Reino Unido, rechazaron los «ataques intencionales» contra centros de culto en Sudán desde que el 15 de abril pasado estallaron los combates entre las Fuerzas Armadas de Sudán (SAF) y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
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Suscríbase al boletín de VenLEl presidente fundador de CSW, Thomas Mervyn, afirmó, en un informe del martes 16 de mayo, que hombres armados «atacaron intencionalmente lugares de culto y a líderes religiosos», y se apoderaron de algunos de estos centros para utilizarlos como «bases militares». Mervyn explicó que estas acciones «violan los derechos humanos internacionales y el derecho humanitario» y «pueden constituir crímenes de guerra».
6 hombres armados atacaron el 13 de mayo la iglesia copta Al-Masalma en Omdurman, en la capital Jartum, y asesinaron a 4 personas. De acuerdo a los informes, el 14 de mayo las RSF desalojaron de la iglesia copta ortodoxa de Santa María al obispo Elia, obispo de Jartum y Sudán del Sur, y a otros miembros del clero para convertir el templo en base militar. Además, las RSF acosaron durante una semana a las personas que estaban dentro de la iglesia copta antes de obligarlas a irse.
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