Obispos de Chile rechazan proyecto de ley que despenaliza el aborto

Los obispos de Chile rechazan proyecto de ley que despenaliza el aborto en el país trasandino, en un comunicado del miércoles 29 de septiembre, después que fue aprobada la iniciativa por la Cámara de Diputados. Los legisladores —con 75 votos a favor, 68 en contra y 2 abstenciones— aprobaron la idea de legislar la iniciativa que van a tramitar en detalle. Tal como precisaron distintas agencias, si Diputados aprueba en detalle el proyecto —que despenaliza el aborto hasta las 14 semanas de gestación—, posteriormente deberá ser tramitado y votado por el Senado.

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El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), tras lamentar la decisión y reafirmar «valores esenciales que en este tema están en juego», reiteró que «el valor de la vida y la dignidad de la persona humana son un fundamento esencial e irrenunciable de la vida en la sociedad». «El primero de los derechos humanos es el derecho a la vida, que ha de ser respetada desde la concepción hasta la muerte natural. Por eso, no matar deliberada y directamente al inocente es un absoluto moral cuyo reconocimiento y protección resulta indispensable para la vida en comunidad», afirmaron los obispos de Chile, que rechazan el proyecto que pretende legalizar el aborto.

Declaración de los obispos ante el Proyecto de Ley que despenaliza el aborto https://t.co/6VCZdSJa92

— Iglesia.cl (@iglesiachile) September 29, 2021

Recordaron que el respeto incondicional a la vida humana debe guiar cualquier consideración ética, legislativa, humana y sanitaria ante la realidad de un embarazo ‘no deseado’. Denunciaron que actualmente «se crea una mentalidad contraria a la vida de la persona engendrada, como si el niño fuera una cosa o un enemigo, y no un ser humano, maravilloso don de Dios». Los prelados precisaron a los católicos «llamados a actuar en la vida pública» desde las convicciones de fe y los argumentos de la razón, que «la inmoralidad del aborto se encuentra entre las enseñanzas constantes de la Iglesia», tras citar a Juan Pablo II en la encíclica Evangelium vitae.