Los obispos de Asia solicitan a Rusia que cese ataques a Ucrania, tras la invasión del país, en un llamamiento realizado por el cardenal de Birmania y presidente de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC), Charles Bo, tras asegurar que el mundo se encuentra en el umbral de la autodestrucción por lo que «todo esto debe terminar». Los prelados se unen al llamamiento del Papa Francisco, quien pide por la paz en Ucrania.
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«El mundo se encuentra en una encrucijada existencial. El escenario de un holocausto nuclear global, propio de una pesadilla, se está convirtiendo en una posibilidad aterradora. Los ataques masivos a Ucrania y la amenaza inminente del uso de armas de destrucción masiva llevaron al mundo al umbral de la autoaniquilación. Las desgarradoras escenas de los ataques en Ucrania conmocionaron al mundo. Todo esto debe terminar», imploró el purpurado birmano, que preside la FABC, integrada por los obispos de las 16 conferencias episcopales de Asia, al invitar a repasar las lecciones de la historia, dado que «hace un siglo, cuando una pandemia en espiral estrangulaba al mundo, hombres megalómanos desataron los demonios de 2 sádicas guerras mundiales».
Los prelados, enfatizó Bo, reiteraron que «el mundo sufrió mucho». «Se topó con la crisis multidimensional de una pandemia que mató a millones de personas y asestó un duro golpe a la economía, empobreciendo a millones de personas», indicaron los obispos de Asia, que solicitan a Rusia que cese el ataque a Ucrania. «Apelamos directamente al presidente Putin. Rusia es uno de los 5 miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, encargado de promover la paz mundial y garantizar los derechos de todas las naciones. Hacemos un llamamiento a Rusia para que cese sus ataques a Ucrania… La paz siempre es posible, la paz es el único camino para el futuro de la humanidad», ratificaron los prelados asiáticos.
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