El obispo de Oyo, Nigeria, Emmanuel Adetoyese Badejo, reitera la importancia de la oración, al afirmar que «para ser buenos padres hay que formarse a través de la oración, el conocimiento de la Palabra de Dios, la información y el acompañamiento», en su mensaje ‘Como José y María: en la clausura del Año de San José’. Considera que para que la sociedad se recupere de los problemas que padece en la actualidad se requieren buenos padres que ayuden a los jóvenes a convertirse a su vez en buenos padres.
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Suscríbase al boletín de VenL «Muchos jóvenes que se convertirán en buenos padres aprenderán de su casa, de sus padres y de su familia. Este es el ambiente ideal y ordinario para aprender las virtudes de la paternidad. Sin embargo, desgraciadamente muchos jóvenes pueden no disfrutar de esta oportunidad», asegura el prelado. «Por ello, las iglesias, las familias, las escuelas y la sociedad deben acudir en su ayuda», sostiene el obispo de Nigeria, quien reitera la importancia de la oración. Indica que «los buenos padres se convierten en buenos padres por el ejemplo que reciben de los adultos».
Badejo precisa que «la Iglesia debe guiar a los jóvenes para que comprendan que el amor a la Escritura, la oración y la obediencia a la Palabra de Dios son esenciales para aprender las virtudes de la paternidad». «Hay que hacer referencia constante a cómo la obediencia a la Palabra de Dios ayudó a José y María a destacarse como padres. La Iglesia debe enseñar a los jóvenes que la vida es sagrada e inviolable, y que cada niño está hecho a imagen y semejanza de Dios Todopoderoso», enfatiza el prelado.
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