La Organización de Mujeres Católicas (OMC) de Malaui atienden a las familias en dificultad, al seguir el ejemplo de san José, al ser nombrada incluso esta acción como una prioridad durante la asamblea general anual celebrada en el Bembeke Teachers Training College de la diócesis de Dedza. El obispo local, Peter Chifukwa, que presidió la Misa de apertura, agradeció el trabajo de la CWO Malaui en las 8 diócesis del país.
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«Si miramos a las familias, la comunidad y el país, las mujeres tienen un papel crucial que desempeñar cada día. La Iglesia está haciendo mucho bien con la contribución de la OMC», precisó el prelado. La asamblea de la OMC, en la que también se debatieron los informes anuales de cada diócesis, se trataron numerosos temas, como los métodos de planificación familiar natural, la importancia de dar testimonio del amor conyugal cristiano, el abuso y el uso adecuado de las redes sociales. «El maltrato infantil es uno de los mayores peligros que estamos viendo en nuestras familias», denunció Juliana Lunguzi, invitada a intervenir en la asamblea y que siempre estuvo involucrada en la política de su país.
En inglés.
Lunguzi sostuvo que «las mujeres deben denunciar cada vez que presencien o sufran cualquier forma de violencia», al enfatizar que ve «a muchos niños y mujeres que sufren en silencio». Lucy Vokhiwa, presidenta nacional de la Organización de Mujeres Católicas de Malaui, que atienden a familias en dificultades, se refirió a la importancia del buen uso de las redes sociales. «Asegurémonos de que nuestras acciones convencen a otras personas para que se unan a nosotros. Los miembros del OMC deben utilizar las redes sociales adecuadamente. La plataforma debe ser una herramienta para llevar un mensaje de salvación y esperanza», indicó Vokhiwa.
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