Miles de argentinos de distintos puntos del país se unieron telemáticamente por la pandemia de coronavirus en la 46° Peregrinación Juvenil a Luján con el lema ‘Madre, abrázanos, queremos seguir caminando’, el sábado 3 de octubre. Se desarrollaron actividades en línea, en una megatransmisión a través de los medios digitales que comenzó a las 6 de la mañana, donde hubo momentos de animación, entrevistas, testimonios, al tiempo que la imagen de la Virgen realizó su recorrido que desde la organización llamaron ‘virtual’. La imagen cabecera de la Virgen de Luján realizó su camino habitual, que fue seguido por los fieles a través de los medios digitales, desde el santuario de San Cayetano, del barrio de Liniers, donde fue despedida por el obispo auxiliar de Buenos Aires, Juan Carlos Ares, alrededor de las 9 de la mañana. En el recorrido, la esperaron en cada parada peregrinos locales junto a sacerdotes. En Morón, Merlo-Moreno, La Reja, General Rodríguez y en el segundo puente antes de llegar a Luján, detuvieron la Virgen para hacer una oración junto a las comunidades.
A cada hora se rezó por una intención especial que fue anunciada por peregrinos de distintos puntos del país. Además, varios presbíteros participaron de esos momentos con la bendición y la oración especial por cada intención. El cardenal y arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, presidió la Misa central en el santuario de Luján, cuya transmisión en vivo fue acompañada por casi 200.000 personas en simultáneo que dejaron sus intenciones a través del chat de los canales de YouTube y en las páginas de Facebook del santuario y del arzobispado de Mercedes-Luján. La Eucaristía fue concelebrada por el obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Oscar Ojea; el arzobispo de Mercedes-Luján, Jorge Eduardo Scheinig; y los obispos auxiliares de Buenos Aires Joaquín Sucunza, Enrique Eguía Seguí y Gustavo Carrara. «En la peregrinación de la vida, siempre podremos contar con su cercanía, en cualquier circunstancia, por eso, con el lema elegido para este año: ‘Madre, abrázanos, queremos seguir caminando’, ofrecemos en esta Misa una sentida acción de gracias a Dios por el don de la vida y por todos los que se han puesto al hombro el cuidado de sus semejantes», reiteró el prelado.
«En presencia de María, queremos pedir por los abuelos, que más sufren el aislamiento, por los enfermos, que son los más pobres de los pobres, y también por tantas familias pobres de nuestra Argentina», imploró Poli. «Nuestro mensaje de gratitud alcanza a los jóvenes, a tantos jóvenes, que seguramente algunos están lamentándose de no poder hacer esta peregrinación. A los peregrinos, y a todos los que dejando la comodidad y venciendo egoísmos, comparten su tiempo asumiendo muchos servicios humanitarios en este tiempo, mostrando el mejor rostro de la solidaridad desinteresada y generosa. Que la servidora del Señor los acompañe para que su heroísmo tenga la recompensa que sólo Dios sabe dar a sus amigos», pidió. Tras finalizar la Misa, la transmisión continuó hasta la medianoche, con más testimonios, entrevistas, oración y música para la patrona de Argentina. Un día antes se difundió el mensaje que envió Francisco a los argentinos que iban a unirse telemáticamente a la 46° Peregrinación Juvenil a Luján, en el que pidió que la «Virgen de Luján nos cuide a todos» y nos otorgue «fuerza» y «su ternura de Madre para seguir caminando».