El custodio de Tierra Santa, Francesco Patton, hizo su entrada solemne en Belén para el comienzo del Adviento después de cruzar el muro conforme al Statu Quo, el sábado 2 de diciembre. La ciudad está rodeada por el muro de separación de Cisjordania que separa el territorio palestino del israelí. El recorrido por el camino de los patriarcas parte del Monasterio de San Elías donde fueron recibidas las autoridades civiles y religiosas, al pasar por la Tumba de Raquel, y tras atravesar las puertas blindadas del enclave que lo encierra y que fueron diseñadas para estas procesiones.
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Suscríbase al boletín de VenL«Haremos un gesto muy importante al pasar de Jerusalén a Belén cruzando un muro. Para mí este es el gesto más importante. El cruce del muro que hacemos cuando hay entradas es seguir diciendo que hasta un muro se puede cruzar», afirmó. En la plaza del pesebre, el custodio fue recibido por las autoridades civiles, entre ellas el alcalde de Belén, representantes de asociaciones locales y el embajador de Croacia.
Patton, en la puerta de entrada de la Basílica de la Natividad, fue recibido por las 2 comunidades corresponsables de la custodia del Lugar Santo y por el guardián de la comunidad franciscana local. , acompañado del canto del Te Deum, entró luego en la iglesia de Santa Catalina donde tuvo lugar un momento de oración. Después se hizo la oración de vísperas, dentro de la cual hubo una procesión hasta la gruta de la Natividad, donde el custodio encendió el primer cirio de Adviento.
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