Francisco pidió a los jóvenes que «griten con sus vidas que Cristo vive y reina», en la Misa por el pasaje de los símbolos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el domingo 22 de noviembre, en la Solemnidad de Cristo Rey. En la celebración eucarística, una representación de chicos centroamericanos y panameños entregaron la cruz de la JMJ y el icono de la Virgen Salus Populi Romani a los portugueses, que celebrarán en 2023 la próxima Jornada.
«Queridos jóvenes: ¡Griten con sus vidas que Cristo vive y reina! ¡Si ustedes callan, las piedras gritarán —cf. Lc 19,40—», indicó el Papa. «Si tienes sueños de gloria verdadera, no de la gloria del mundo que va y viene, sino de la gloria de Dios, este es el camino. Porque las obras de misericordia dan gloria a Dios más que cualquier otra cosa», aseguró el Pontífice durante la homilía. «En el momento del juicio final el Señor se basa en las decisiones que tomamos», recordó.
Indicó que «la vida es el tiempo de las decisiones firmes, fundamentales, eternas». «Miremos a Jesús, pidámosle la valentía de elegir lo que nos hace bien, para seguir sus huellas en el camino del amor, y encontrar la alegría», exhortó. Posteriormente, recordó a san Martín de Tours, un joven santo cuyo carisma es siempre actual. «Yo estoy ahí, le dijo Jesús a un joven soldado hace algunos siglos. Tenía 18 años y todavía no estaba bautizado. Un día vio a un pobre que pedía ayuda a la gente, pero no la recibía porque ‘todos pasaban de largo’. Y aquel joven, ‘comprendió que, si los demás no tenían compasión, era porque el pobre le estaba reservado a él'», reflexionó el Papa.
«Entonces la rasgó por la mitad y dio una mitad al pobre, sufriendo las burlas de algunos a su alrededor. La noche siguiente tuvo un sueño: vio a Jesús, vestido con el trozo de la capa con que había cubierto al pobre. Y lo escuchó decir: ‘Martín me has cubierto con este vestido’. San Martín era un joven que tuvo aquel sueño porque lo había vivido, aun sin saberlo, como los justos del Evangelio de hoy», aseguró. Al final de la Misa, Francisco indicó que a partir de ahora la JMJ diocesana, en lugar de celebrarse el Domingo de Ramos, se celebrará en la Solemnidad de Cristo Rey.
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