Aproximadamente unos 20 estudiantes del programa Capilla País, de la Pastoral de la Universidad Católica de Chile (UC), construyen en una comunidad una iglesia que sustituye a la destruida por terremoto 2010. Con 90 capillas construidas y 9 refaccionadas hasta comienzos del 2020, el proyecto tuvo que suspender su labor por la pandemia de coronavirus, pero luego de una readecuación del trabajo con un protocolo para evitar la propagación del COVID-19, un primer grupo construyó la capilla de la parroquia La Natividad en Lolol, entre el 3 y 12 de marzo.
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«Esperamos varios años para que saliera una capilla y por fin llegó», sostuvo Héctor Cornejo, de la comunidad de Lolol en Los Tricahues, en la Región O’Higgins, al ver el trabajo que realizaban los estudiantes de la Universidad Católica de Chile. El sábado 27 de febrero de 2010, hubo un terremoto de 8.8 grados en la escala Richter en el centro-sur de Chile un terremoto, seguido de un maremoto, que dejó alrededor de 500 muertos y 2.000.000 de damnificados. El hecho fue calificado como una de las 10 catástrofes naturales más fuertes ocurridas en el mundo. Según la Pastoral UC, el terremoto afectó a 545 templos —entre iglesias y capillas— y casas parroquiales. Frente a esta situación se creó Capilla País. La iniciativa concentró sus esfuerzos en el fortalecimiento de las comunidades y en la construcción de una iglesia para estas.
El jefe general de Capilla País, Pedro Fernández, explicó que el proyecto no sólo consiste en apoyo material, sino también espiritual y en el cumplimiento de una misión. «Capilla País construye Iglesia al encuentro de todos. Si bien este año fue más difícil y pudimos a salir como otros años a construir iglesia física, tenemos la misión y el gran desafío de salir a construir una Iglesia que hace mucho más falta y que puede ser mucho más importante que es la iglesia doméstica, la iglesia interior en cada una de estas comunidades», indicó Fernández, al asegurar que según el contexto actual, Capilla País continuará con la reestructuración de su planificación para las misiones de los 3 años próximos. En las mismas fechas, otros 20 jóvenes de Misión País misionaron en un campamento de San Felipe, en Valparaíso. Gonzalo Grebe, jefe nacional de Misión País, explicó que durante los 10 días se hicieron talleres con niños y adultos, se celebró la Misa diaria en una capilla que la misma gente construye. Además, se entregaron biblias, rosarios y nuevos testamentos.
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