El cardenal y arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, envió un mensaje en el Día del Scout y de Nuestra Señora de los Scouts, el sábado 5 de septiembre. Con su pañuelo en el cuello, el capellán de los Scouts Católicos en la Argentina (SCA) recordó que él también es scout desde los 6 años, en la parroquia Nuestra Señora de la Salud, del barrio porteño de Versalles, el «grupo número uno» de los grupos católicos en Argentina.
El prelado precisó que un gran símbolo de este movimiento son los pañuelos, pañuelos de juego, al destacar que «el escultismo educa jugando». El cardenal Poli destacó el servicio, en múltiples tareas, que prestan los scouts católicos en las comunidades, en las provincias, en sus pueblos, en este tiempo de pandemia de coronavirus. «Nos llegan una cantidad de servicios que se hacen por estar ‘siempre listo’, como decimos nosotros», indicó. «Que este día que celebramos nos recuerde que BP (Baden Powell, el fundador) nos ha dado un valor esencial en el escultismo, que es el amor al prójimo. Todos los hombres de este mundo, de la gran familia humana, están en nuestro corazón», destacó.
«Uno lleva siempre en el corazón esta pasión que nos devora a todos, la pasión por el juego, por el servicio, por las cosas de la naturaleza y también por lo que nos dejó BP: amor a la Palabra de Dios en estos dos grandes libros: la naturaleza, la creación, donde jugamos y entramos como dueños y señores, porque Dios la creó para nosotros; y la Palabra, que nos habla del Reino, de la vida como hermanos, del amor al prójimo, especialmente nosotros que creemos en Jesús, el Hijo de Dios, el que nos ha dado la ley del servicio», ratificó el cardenal Poli, en un mensaje a los Scouts Católicos.
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