El arzobispo de Chattogram y presidente de la Comisión Episcopal para la Juventud, Lawrence Subrata Howlader, precisó que en Bangladés «muchos jóvenes católicos ayudaron a los necesitados durante la pandemia de COVID-19», al destacar la labor de los jóvenes que participan en la Iglesia de ese país de Asía del Sur.
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«En muchas parroquias, los jóvenes colaboran con los ancianos y los niños y son muy activos. Muchos jóvenes católicos ayudaron a los necesitados durante la pandemia de COVID-19… Los jóvenes necesitan poderosas fuentes de inspiración, y luego van para delante», indicó el prelado, al afirmar que es importante «la formación permanente de los niños y jóvenes, en la familia, en la escuela y en la universidad». «De esta manera también tendremos más vocaciones religiosas», sostuvo el arzobispo de Bangladés, tras destacar la labor de muchos jóvenes católicos.
Consideró que «los jóvenes, recibiendo una formación adecuada, pueden superar, con la ayuda y la gracia de Dios, todos los retos, miedos e inquietudes que les frenara a la hora de realizar sus sueños», y de este modo «así pueden ser misioneros del Reino de Dios en esta tierra». El arzobispo de Bangladés que participó en el Sínodo sobre la Juventud, celebrado en el Vaticano, y pudo conocer de primera mano la vida de los jóvenes en el mundo. «En los últimos años, participé en todas las Jornadas Nacionales de la Juventud. Observé con qué sinceridad trabajan los jóvenes por la Iglesia. Me impresionó su mentalidad positiva y su dedicación, en el espíritu del Evangelio», reflexionó.
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