La investigadora y miembro del Consejo Editorial del diario ‘La Prensa’, Martha Patricia Molina, denunció que entre 2022 y 2023 65 religiosas fueron expulsadas por la dictadura sandinista de Nicaragua y que «se les prohibió la entrada a 6 de diferentes congregaciones religiosas, para un total de 71». La autora del informe ‘Nicaragua ¿una Iglesia perseguida?’, que indicó que más de 500 ataques contra la Iglesia en el país desde 2018, sostuvo que fueron afectadas unas 10 congregaciones religiosas en el país.
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La defensora de derechos humanos aseguró que algunas de las congregaciones afectadas son las Dominicas de la Anunciata, Misioneras de la Caridad, Monjas Trapenses, Religiosas de la Cruz del Sagrado Corazón, Hermanas Pobres de Jesucristo de Nicaragua. «Por sido motivos de seguridad no mencionare el resto de congregaciones —5— porque ya sabemos que la dictadura es capaz de todo. Las monjas fueron expulsadas en su mayoría con violencia psicológica», lamentó, tras precisar que 4 sacerdotes de diferentes diócesis y varias religiosas le aseguraron que la cifra de 71 monjas víctimas de represión es mayor al contabilizado en su estudio, donde se menciona a 32 expulsadas.
«Me comunican que es difícil en este momento encontrar alguna congregación con hermanas extranjeras porque todas han sido expulsadas», enfatizó Molina. Afirmó que sus fuentes en el país expresaron «que a las monjas nicaragüenses que quisieron retornar al país, para llenar el espacio de las extranjeras que fueron expulsadas, se les negó la entrada». «No nos enteramos de la cantidad exacta porque la mayoría de las congregaciones decidieron guardar silencio y ofrecer ese martirio por la conversión de los dictadores de Nicaragua y quienes trabajan para ellos», aseveró.
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