La diócesis de Ávila, a cargo del obispo José María Gil Tamayo, redactó el protocolo para desarrollar las actividades de catequesis, en el que se establece que se realizarán en grupos pequeños, con distancia y ventilación, por la pandemia de coronavirus. Incluyó en el protocolo las últimas medidas del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas.
La jurisdicción eclesiástica indicó que deberá haber distancia de al menos 1,5 metros, las salas tendrán que ventilarse todo lo posible, y los grupos tendrán que ser como máximo de 10 jóvenes. Aseguró que con el protocolo, además del cumplimiento de la normativa vigente, pretende que «todas las parroquias tengan herramientas comunes para el inicio de la catequesis con las que se facilite la comunión y la unidad de acción en un momento en el que el intercambio de niños y preadolescentes entre parroquias es bastante frecuente».
El protocolo para catequesis en Ávila precisa que la inscripción que se realizará a través de medios digitales -donde sea posible-, o cómo será la forma de actuar en el caso de que la situación sanitaria impida la catequesis presencial. Asimismo, la información concreta de cómo se va a aplicar en cada parroquia asegura que es mejor conocerla a través del párroco y los responsables de la catequesis. Asimismo, y de forma excepcional, desde la Delegación aconsejaron que no haya catequesis presencial en las iglesias únicamente para niños de primer año de catequesis de iniciación cristiana «en aquellas parroquias grandes que tengan muchos niños y necesiten espacios para cumplir con la normativa sanitaria».