La religiosa misionera Cristina Fernández Hoyos, de las Hermanas Franciscanas Misioneras de María Inmaculada, fue distinguida con la Cruz al Mérito Militar con distintivo blanco por su labor sanitaria y de formación con mujeres jóvenes y adultas en Malí. La monja pertenece a pertenece a la congregación que desde 1998 brindan asistencia en Bamako, la capital de Malí, a donde se desplazó en marzo pasado la ministra de Defensa de España, Margarita Robles.
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La hermana Cristina está destinada en Malí desde 2020, a donde llegó tras una breve estancia en Burkina Faso. La monja atiende un centro de salud en Kulikoro, a 60 kilómetros de Bamako, y colabora con labores administrativas de la congregación. En declaraciones a Obras Misionales Pontificias, la misionera se refirió a su labor 3 días por semana: «Paso consultas de medicina general, hago ecografías obstétricas y, cuando puedo, colaboro con mi compañero médico en cesáreas», indicó, al explicar su labor en una región donde la atención a la mujer y su promoción son esenciales.
La misionera Cristina Fernández Hoyos, Cruz del Mérito Militar por su labor en Malí. La ministra Margarita Robles ha expresado su agradecimiento y cariño: «eres un ejemplo de coraje, generosidad y entrega».https://t.co/7CYq0nrS7w
— OMP España (@OMP_ES) July 7, 2023
«El papel de la mujer es fundamental en la vida familiar del país. Allí la mujer está relegada como a un segundo plano», lamentó. A través de la formación en Corte y Confección, Peluquería y Estética y Pastelería, las misioneras pretenden que «tomen conciencia de su dignidad de hijas de Dios, que decidan por sí mismas y que sean autónomas también en lo económico». Las jóvenes a las que ayudan y viven en una residencia, casi un centenar, tienen entre 15 y 21 años. Las más mayores, que acuden a un centro de promoción donde estudian, llegan a los 30.
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