El cardenal Angelo Becciu, que afronta un juicio por corrupción en el Vaticano, grabó en secreto una conversación telefónica con Francisco, cuando el Papa se recuperaba de una cirugía intestinal en julio del 2021. El Pontífice nombró a Becciu en 2018 cardenal y prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, en el cual se desempeñó hasta 2020 cuando le aceptó su renuncia al cargo y a los derechos derivados del cardenalato.
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Suscríbase al boletín de VenLUn tribunal vaticano escuchó el jueves 24 de noviembre una llamada telefónica grabada entre el principal acusado, el purpurado italiano y Francisco —sin que el Pontífice lo supiera—. En la audiencia del juicio en el que Becciu es acusado de malversación de fondos, se solicitó a los periodistas que desalojen la sala para reproducir la grabación. Un grupo de abogados que escuchó la cinta aseguró que en ella se puede escuchar a Becciu pedirle al Papa que le confirme que le había autorizado un pago para ayudar a liberar a una monja secuestrada en África. Según indicaron los abogados, el Pontífice parecía confundido por la llamada y le pidió que enviara una nota escrita para detallar su petición.
La policía del Vaticano descubrió en 2020 que Becciu le habría entregado a la empresaria Cecilia Marogna más de medio millón de euros provenientes de la Secretaría del Estado Vaticano. Stefano de Santis, uno de los principales investigadores de la gendarmería vaticana, sostuvo que el purpurado le habría «rogado» para no hacer público este delito y evitar que su familia se viera perjudicada. Además, se habría comprometido a devolver el dinero. El cardenal Becciu, que grabó una conversación telefónica con el Papa Francisco, precisó en su defensa que los pagos corresponden a negociaciones secretas para liberar a una religiosa colombiana secuestrada en África, y que el Pontífice estaría al tanto de esos movimientos.
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