El arzobispo de Mendoza y vicepresidente segundo de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Marcelo Colombo, sostuvo que «templos grandes y espaciosos como muchas de nuestras iglesias deberían poder recibir en sus celebraciones un porcentaje de la capacidad de ocupación», al reiterar su disconformidad con las medidas del gobierno provincial para restringir la celebración de las misas con fieles, en un comunicado titulado ‘Fe y familia, siempre esenciales’.
El prelado pidió, tras valorar las palabras del gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, «en torno a la importancia de la salud espiritual de los mendocinos», que respalde con «énfasis el pedido de habilitación para las celebraciones religiosas y los encuentros de familia» en la nota que elevará a las autoridades nacionales. «Como muchos de ustedes, sacerdotes y laicos, experimento con frustración que una vez más familia e Iglesia sufran la mirada restrictiva de las disposiciones que se adoptan, dada su significación para la vida personal y social. Nuestros laicos y sacerdotes han dado a nuestras iglesias y templos una cuidada aplicación de los sucesivos protocolos que se fueron dictando. Con escrupulosidad de quirófano y terapia intensiva, he visto desenvolverse nuestras celebraciones religiosas de este tiempo», aseguró el arzobispo Colombo, al asegurar que «muchas de nuestras iglesias deberían poder recibir en sus celebraciones un porcentaje de la capacidad de ocupación».
«Pido a Dios que suscite capacidad de diálogo y de comprensión en quienes nos gobiernan, a nivel nacional, provincial y municipal. Estos largos meses de aislamiento y restricciones tienen enormes efectos sobre nuestras vidas, sobre nuestros vínculos, sobre nuestras expectativas, sueños y proyectos, además del impacto emocional y psicológico, y su evidente incidencia sobre la economía», precisó el arzobispo Colombo, quien recordó que «ya no estamos en el 20 de marzo donde una incipiente cuarentena parecía concluir en 15 días».
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