El cardenal electo y rector mayor de los salesianos, Ángel Fernández Artime, indicó que acepta «el nuevo servicio en la Iglesia sin haberlo buscado ni deseado», en una carta en la que precisó las disposiciones recibidas del Pontífice, después de anunciar que va a crearlo purpurado en el Consistorio del 30 de septiembre próximo. El sucesor de don Bosco, de 62 años, va a ser uno de los 18 nuevos cardenales que pueden votar en un eventual Cónclave para elegir al nuevo Papa.
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Artime imploró, en la misiva que envió a todos los salesianos, que intensifiquen sus oraciones por el Pontífice y por él mismo «ante la perspectiva del nuevo servicio en la Iglesia que, como hijo de Don Bosco, acepto por obediencia, sin haberlo buscado ni deseado». Indicó que su próxima creación como miembro del Colegio Cardenalicio es una noticia «inesperada», que es recibida «con fe», como un «don que el Papa Francisco nos ha hecho como Congregación Salesiana y como Familia de Don Bosco».
Explicó que, poco después del anuncio del Consistorio, recibió una carta del Papa en la que lo invitaba a un encuentro personal para «acordar los tiempos necesarios en mi servicio como rector mayor para el bien, sobre todo, de la congregación», una situación que no tiene precedentes en la vida de la congregación. El mandato del actual rector mayor, que se elige en un capítulo general cada 6 años, no expira hasta dentro de 3 años, por lo que habrá que adelantar todo el proceso.
Sostuvo que Francisco dictaminó que en su conversación con Artime que continuará como rector mayor, también como cardenal, durante un año y que va a convocar un capítulo general para febrero de 2025, en el que se elegirá un nuevo superior, y después presentará su renuncia al gobierno de la congregación el 31 de julio del 2024. A partir de entonces, será el actual vicario del rector mayor, el italiano Stefano Martoglio, quien asuma las funciones de superior general.
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