Francisco aseveró que «es preocupante que haya personas perseguidas sólo porque profesan públicamente su fe», al recibir recientemente en el Vaticano al Cuerpo Diplomático acreditado ante la Santa Sede. El Papa propuso a los embajadores para restaurar la paz «retomar algunos elementos de la Pacem in terris, un texto extremadamente actual incluso habiendo cambiado gran parte del contexto internacional», al partir de la encíclica de Juan XXIII.
Síganos en Telegram
Colabore con Verdad en Libertad
Suscríbase al boletín de VenL«Para san Juan XXIII, la paz es posible a la luz de cuatro bienes fundamentales: la verdad, la justicia, la solidaridad y la libertad. Estos son los pilares que regulan las relaciones tanto entre los individuos como entre las comunidades políticas», sostuvo el Pontífice, quien se refirió a la paz en la verdad. «La paz exige que ante todo se defienda la vida, un bien que hoy es puesto en peligro no sólo por los conflictos, el hambre y las enfermedades, sino demasiadas veces incluso desde el seno materno, afirmando un presunto ‘derecho al aborto’», recordó, en su discurso del lunes 9 de enero.
Destacó que «la paz también exige que se reconozca universalmente la libertad religiosa». «Es preocupante que haya personas perseguidas sólo porque profesan públicamente su fe y que en muchos países la libertad religiosa esté limitada», enfatizó el Papa Francisco. Además, al hablar de la paz en la justicia, sostuvo que «existe el riesgo de una deriva, que asume cada vez más el rostro de un totalitarismo ideológico», lo que conduce «más bien a un retroceso general de la humanidad, al violar la libertad de pensamiento y de conciencia». Denunció que «se emplean cada vez más recursos para imponer, especialmente en relación a los países más pobres, formas de colonización ideológica».
Puede interesarle: Francisco exhorta a defender libertad religiosa en último discurso en Kazajistán.
