Un musulmán agrede y asalta hace pocos días a la religiosa Scholastica Jopomala Gomes, que pertenece a las Hermanas Catequistas del Inmaculado Corazón de María, en Sreeghonti, en la diócesis de Rajshahi, Bangladés. La monja, que enseña en el colegio Saint Joseph’s Haigh de Bonpara a solo 6 kilómetros del convento al que regresaba, se bajó de su rickshaw —vehículo de 2 ruedas—y comenzó a caminar por la calle cuando el islámico intentó robarle el bolso.
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Suscríbase al boletín de VenL El asaltante le dio una trompada a la religiosa —que intentó protegerse— y escapó con el teléfono móvil, un reloj y algo de dinero de la monja. El párroco en Bhabanipur, Joseph Mistri, explicó que Gomes se encuentra herida de gravedad en un ojo, por lo que, tras denunciar el ataque en la policía local, fue trasladada a Dacca para recibir atención médica. El obispo de Rajshahi, Gervas Rozario, aseveró que «lo que pasó es muy triste». «Pido a la policía que capture al agresor musulmán para que se haga justicia», exigió el prelado, después que el asaltante agrede y asalta a la religiosa.
‘Asia News’ recordó que en Bangladés son innumerables los ataques contra los cristianos, de modo particular contra los religiosos y los misioneros. En 1998, una escuela de misioneros en Dacca fue atacada por musulmanes que querían apropiarse de los terrenos de la Iglesia en el país. En 2001, al menos 10 católicos fallecieron y más de 50 quedaron heridos tras la explosión de una bomba en la parroquia de Goplagonj. En 2015, en Dinajpur, el Estado Islámico atacó a tiros a un misionero italiano del PIME, el padre Piero Parolari, que posteriormente se recuperó. En 2018, la monja Madeline, de las Misioneras de la Caridad, fue apuñalada cuando regresaba del banco, en Moulovibazar.
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