El obispo de Formosa, José Vicente Conejero, lamenta que «la mentira y el mal estén enquistados, muy extendidos y a la orden del día en nuestra sociedad actual», en su editorial del periódico diocesano ‘Peregrinamos’, tras recordar que «las exigencias necesarias para ser auténticamente libres y crecer en el verdadero y pleno desarrollo, tanto personal, familiar, como socio-político-económico, son la verdad y el bien».
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Suscríbase al boletín de VenL Conejero consideró que «una democracia, sin valores ni principios morales que respeten y salvaguarden la dignidad de la persona, olvidando el bien común como fin principal de la acción de la política, utilizando cualquier medio para ‘conquistar, mantener o aumentar a cualquier costo el poder’, destruye la convivencia social y está abocada a su disolución». «Así de clara y tajante es la enseñanza social de la Iglesia», alertó, tras citar la encíclica Veritatis splendor de san Juan Pablo II. Mencionó que durante agosto se recibirán «múltiples e insistentes» mensajes y propuestas de los candidatos a la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación.
El prelado invitó a tener presentes las exhortaciones del Concilio Vaticano II, tras recordar que «los partidos políticos deben promover todo lo que a su juicio exige el bien común; nunca, sin embargo, está permitido anteponer intereses propios al bien común». «Los catequistas, los niños y adolescentes misioneros, en su mes, los abuelos y las personas mayores, con su enseñanza y testimonio, nos ayuden a progresar en la fe, alentarnos en la esperanza, a vivir y obrar siempre en la belleza de la verdad y del bien, condiciones y exigencias necesarias para alcanzar la auténtica libertad», enfatizó el obispo Conejero, quien lamenta que «la mentira y el mal estén enquistados».
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