LEY DE ABORTO COMENTADA. ANÁLISIS CRÍTICO DE LA LEY 27610 (7)
Por Nicolás Lafferriere.
Continuación de Ley de aborto comentada. Análisis crítico de la ley 27610 (6).
f.8) Los problemas de fondo que motivaron las recomendaciones
En línea con lo anterior, considerando la tradición jurídica argentina de protección de la vida por nacer y la justicia de buscar siempre preservar el derecho a la vida, la forma de responder a las recomendaciones de los organismos es atacar los problemas de fondo que motivaron las recomendaciones, haciendo adecuada distinción entre esos problemas y otras consideraciones que responden a perspectivas ideológicas y sesgadas. Justamente, ya hemos visto que, para solucionar el problema de la clandestinidad y las presiones para abortar, el camino era el trabajo sobre las causas que llevan a las madres a considerar el aborto. Es decir, es legítimo que el país, tomando nota de los problemas reales, haga una evaluación integral, que procure tener en cuenta todas las dimensiones en juego y busque las medidas proporcionadas y más idóneas para avanzar en soluciones de fondo. Así, los compromisos asumidos por el Estado argentino a los que refiere el art. 1 de la ley se vinculan con problemas de fondo, como la mortalidad materna o el embarazo adolescente, pero sin que sea la legalización del aborto la solución que deba sí o sí adoptarse.
En los próximos dos apartados nos referiremos al tema de la mortalidad materna como cuestión de salud pública y al específico problema del embarazo adolescente.
g) Aborto y salud pública
Al igual que sucedió en 2018, aunque con menos peso en los debates parlamentarios, la cuestión de la mortalidad materna y el aborto como problema de salud pública fue uno de los ejes de la discusión. El argumento a favor de la legalización del aborto puede verse reflejado en los que sostuvo el ministro de Salud, Ginés González García, ante las comisiones de Diputados el 1-12-2020: «Los 1100 o 1200 abortos y las 120 internaciones diarias solamente en los hospitales públicos, es algo que viene pasando hace mucho tiempo. Como se dijo acá, las consecuencias son las muertes, infecciones, enfermedades, internaciones y gastos… El aborto, visto desde la salud pública, es un problema serio. Si lo resolvemos de manera científica y técnica, eliminamos una causa de muerte. Esto ya sucede en el primer mundo desde hace cincuenta años. Además, la penalización estigmatiza a las mujeres: las coloca en el lugar de la condena y hace que lleguen más tarde a los servicios, con lo cual las consecuencias son peores. Por supuesto que esto también genera que los servicios de salud no tengan una respuesta adecuada para estos casos».
Nos hemos referido al tema en distintos escritos. A fin de brindar algunas de las respuestas críticas a esta postura, podemos citar la exposición de Graciela Moya ante el Senado el 16-12-2020 y los estudios de María Elena Critto. A continuación, ofrecemos un resumen de algunos de los argumentos que Critto planteó en su exposición ante las comisiones del Senado el 15-12-2020:
- Sobre las 162.000 defunciones de mujeres de 2018, «la muerte por aborto provocado representa el 0,01 de estas muertes y está en el puesto 72 del ranking de muertes de causa desglosada. Respecto de las mujeres en edad fértil de 15 a 44 años, el aborto representa el 0,2 por ciento de las defunciones de mujeres en edad fértil».
- Sobre el aborto como la principal causa de muerte materna, «en 2018, de las 257 muertes maternas, 35 se debieron a aborto por todo tipo de causas. De estas, las que podrían tener un diagnóstico de aborto por carácter clandestino son 19, que se deben a aborto médico, otro aborto, aborto no especificado e intento fallido de aborto. Estas 19 representan el 7 por ciento de las 257 muertes maternas prevenibles del año 2018».
- Sobre la evolución de la razón de la mortalidad materna en general y por la razón de mortalidad materna por aborto: «La razón de mortalidad materna por aborto en el período 2001-2018 ha disminuido en un 62 por ciento y, actualmente, es una de las más bajas, sin aborto legalizado en la Argentina».
- Sobre el problema del subregistro, «los informes de los organismos internacionales califican al registro de mortalidad materna de la Argentina como de buena calidad y utilizable».
- Sobre si la legalización del aborto reduce la mortalidad materna, «estudios internacionales y evidencia científica en más de 181 países señalan que la legalización del aborto no tiene un efecto causal en la mortalidad materna. Lo que sí disminuye la mortalidad materna es el acceso a la educación, el acceso a la salud calificada, la mejora en las condiciones de vida y la información para el control de la propia fertilidad».
- «Las muertes maternas están altamente correlacionadas con las CONE, que son las Condiciones Obstétricas y Neonatales Esenciales, definidas por la Organización Mundial de la Salud, justamente, para asegurar la salud materno infantil. Nuestras maternidades públicas, en el último estudio realizado [2010], solamente cumplen en un 44 por ciento con estas CONE. Con respecto a la sangre segura y a los servicios de emergencias obstétricas, solamente el 54 y el 55 por ciento de nuestras maternidades cumple con estas condiciones. Teniendo en cuenta que la una de las principales complejidades de la embarazada es la hemorragia y, también, del aborto, quiero remarcar que solamente el 54 de nuestras maternidades cumplen con ellas».
- Sobre el número de hospitalizaciones por abortos clandestinos, «los datos indican que los egresos hospitalarios por aborto incluyen todo tipo de abortos, y son el 10 por ciento de las hospitalizaciones por maternidad, y han disminuido en el período 2005-2016 en un 43 por ciento. Estos egresos hospitalarios por aborto incluyen todo tipo de abortos; los abortos espontáneos también. El CIE no permite identificar el carácter de clandestinidad del aborto».
- Sobre las afirmaciones referidas a que Uruguay y Chile disminuyeron la mortalidad materna con la legalización de aborto, Critto citó los datos oficiales de esos dos países: «Chile disminuyó la mortalidad materna desde que se derogó la ley del aborto, con el aborto penalizado, y llegó a una de las tasas de mortalidad de las más bajas del mundo. Uruguay bajó la mortalidad materna y la maternidad materna por aborto antes de la legalización del aborto. Hasta 2011, tuvo una disminución significativa. Por el contrario, a partir de la legalización, aumentaron la cantidad de abortos y aumentó también la tasa de mortalidad materna por todo tipo de causas».
LEY DE ABORTO COMENTADA. ANÁLISIS CRÍTICO DE LA LEY 27610 (7)