La policía civil indicó que incendian la iglesia católica San Andrés, ubicada en el sector de Roble Huacho en la Región de La Araucanía, en Chile, con bombas molotov arrojadas desde vehículo en movimiento, el viernes 16 de abril por la noche. Personal especializado de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) precisó que hubo intencionalidad en el inicio de las llamas en el templo —que depende de la parroquia San Antonio de Padre Las Casas del obispado de Villarrica—, tras las primeras indagatorias.
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El templo —que contaba con un campanario ubicado a un costado de la nave central— quedó completamente destruido por las llamas. El obispo de Villarrica, Francisco Javier Stegmeier, condenó el ataque incendiario en la iglesia, ubicada en la ruta que une Padre Las Casas con Cunco e inaugurada en 1999, en un comunicado que emitió al día siguiente del incendio. «Mi afecto y mi solidaridad está, en primer lugar, con la comunidad eclesial que ha sufrido esta afrenta», aseguró.
Sostuvo que el hecho —en el que incendian esta iglesia en Chile con bombas molotov— tiene que hacer reflexionar a los fieles sobre «el porqué de esta violencia irracional» y los caminos que deben «transitar todos como sociedad para dar solución a la crítica situación que estamos viviendo» «Hago un llamado a las comunidades católicas de la Diócesis y también a todos los hermanos que profesan creer en Cristo a seguir orando, con más intensidad, por todos aquellos que sufren esta inútil y creciente violencia, así como por aquellos que equivocadamente buscan soluciones a través de la destrucción y del terror y también por las autoridades responsables del bien común», imploró el prelado.
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