El sacerdote Tony Neusch, quien es rector de la catedral católica de Santa María, en la ciudad de Amarillo, Texas, fue rociado con gas pimienta mientras confesaba la semana pasada. Si bien la parroquia indicó que presuntamente «alguien que lidia con problemas de salud mental» roció al presbítero, la policía investiga el incidente y no está claro si los oficiales identificaron a un sospechoso.
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«Estoy bien y no necesito atención médica», afirmó el padre Tony, en el comunicado. La catedral decidió suspender temporalmente sus confesiones regulares, pautadas 2 veces a la semana, y por el momento los sacerdotes sólo escuchan confesiones con cita previa. Las confesiones regulares se reanudarán después de que la catedral instale cámaras de seguridad en la capilla.
El presbítero lamentó «cualquier inconveniente que esto pueda causar, pero es necesario preservar la seguridad de nuestros confesores y de aquellos que esperan recibir el Sacramento». Neusch se negó a hacer comentarios cuando ‘CNA’ lo contactó el lunes 15 de abril. El Departamento de Policía de Amarillo no proporcionó de inmediato el informe policial a ‘CNA’ y además se negó a comentar sobre el incidente.
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