Refugiados cristianos en Turquía con problemas críticos al escapar de persecución a causa de su fe

Varias ONG internacionales presentaron un informe que denunció que los refugiados cristianos iraníes en Turquía, de modo particular los conversos, se encuentran con problemas críticos al escapar de la persecución a causa de su fe por lo que «viven en condiciones precarias, sin trabajo ni ingresos estables, con el riesgo constante de ser deportados». Indicaron que padecen abusos y despidos por parte de los empleadores, con limitadas oportunidades de ayuda financiera, alquileres elevados y falta de educación para los niños, entre otros.

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El documento de las entidades más activas en la defensa de los refugiados cristianos y las minorías perseguidas evidenció que en la Turquía del presidente Recep Tayyip Erdogan, que hizo del «nacionalismo y islam» su carta de triunfo, el reasentamiento puede llevar mucho tiempo. En gran parte del estudio se denunció de relieve las dificultades que deben enfrentar los exiliados. La falta de trabajo, explotación y problemas económicos, retiro del seguro médico, discriminación, racismo, hostilidad social y amenazas a la seguridad, son algunas de ellas. Aseveró que incluso hay pocas oportunidades de expatriación hacia Canadá, Australia y Estados Unidos, los destinos más buscados.

«Mi familia y yo recibíamos continuas presiones debido a nuestra religión cristiana. Algunos miembros de nuestra iglesia fueron arrestados. Nosotros huimos por miedo a que también nos encerraran en la cárcel», aseguró Amin Salmani, uno de los muchos testimonios recolectado en el estudio que publicaron en junio varios grupos activistas internacionales —Open Doors, Csw, Article18 y Middle East Concern—, sobre las persecuciones contra los cristianos en Irán y las dificultades de aquellos que eligen huir al extranjero haciendo una primera escala en Turquía.

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