Los obispos de Costa Rica animaron en Cuaresma a «la práctica de obras de misericordia», en un mensaje en el que reiteraron que «es necesaria la reflexión personal y comunitaria para saber cómo es nuestra respuesta al Señor». Exhortaron a que este tiempo «nos ayude a ser solidarios y que lo hagamos en el silencio como nos lo pide el Señor», toda vez que se practique el mandamiento que Jesús nos enseñó.
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Suscríbase al boletín de VenL«El camino cuaresmal propone un profundo encuentro con Dios y exige de nosotros una respuesta que se refleje en el servicio y cuidado al hermano, en la práctica de las obras de misericordia que nos conviertan a cada uno en otro Cristo», sostuvieron. Los obispos de la Conferencia Episcopal de Costa Rica solicitaron que «la escalada cuaresmal nos permita oír la voz de Dios y levantarnos para servir a los demás.
Reiteraron que «servir es amar, y amar es sinónimo de ser otro Cristo en cuanto discípulos suyos». Los prelados, que mencionaron en su mensaje de Cuaresma las palabras de Francisco sobre el camino sinodal que vive la Iglesia, elevaron sus oraciones por la Iglesia en Nicaragua «en su caminar de cruz», al tiempo que «animados por una nueva oportunidad, levantémonos para servir y llevar el Evangelio a los demás».
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