La Iglesia en Angola organiza una escuela «informal» para niños en la capilla de la parroquia de Sagrada Familia, en Barra do Dande. La educación en Angola es de baja calidad, dado que carece de infraestructuras, material escolar y profesores formados, por lo que entre las iniciativas de la Sociedad de Misiones Africanas (SMA) en Angola, no falta la atención a la educación de la población de las periferias. A pesar de ser obligatoria y gratuita durante 4 años, para los niños de entre 7 y 11 años, el gobierno calcula que unos 2.000.00 de niños no van a la escuela.
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El padre Luigi Frattin, cuando llegó a la parroquia de Sagrada Familia, visitó la comunidad de San Domingos, y le llamó la atención el gran número de niños que no van a la escuela por diversas razones, como la distancia impracticable para que los niños pequeños lleguen a la escuela pública, la pobreza de las familias, en las que sólo 1 o 2 niños están matriculados en la escuela mientras los demás permanecen excluidos o esperan tiempos mejores. «Reflexionando con el catequista encargado de la comunidad, nació la idea de organizar una escuela ‘informal’ en la capilla que acababa de construirse para dar a los niños la posibilidad de aprender al menos a leer y escribir», explicó el presbítero misionero que trabaja entre los barrios y comunidades de la periferia de Luanda, la capital del país.
«Prometí que apoyaría la iniciativa: se hicieron algunas obras en la iglesia, donde se crearon 2 salas cerradas para almacenar diversos materiales. Compramos pizarras, sillas de plástico, cuadernos, bolígrafos, libros para el profesor y otro material escolar», afirmó el padre Luigi, después de que la Iglesia en Angola organiza una escuela «informal» para niños en una capilla. «Implicamos a las familias y les explicamos el sentido de esta iniciativa pidiendo a los padres que participen en los gastos con una pequeña aportación mensual que se suma a la subvención que damos a los profesores. En diciembre abrimos la matrícula y en enero de 2022 comenzaron las clases», sostuvo, al detallar que muchos niños se sumaron a las primeras inscripciones y al final unos 120 alumnos terminaron en junio el año escolar con sus exámenes finales.
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