Las hermanas ursulinas de la Virgen María Inmaculada de Gandino se encuentran al servicio con talleres, guarderías y asesoramiento en Polonia, país en el que cumplirán 30 años de presencia en 2025. La comunidad comenzó su ministerio en la diócesis de Drohiczyn en 1995, desarrollándose después en Legionowo. Sor Laura Boschi, responsable del instituto en el país, se refirió a las obras de su congregación en suelo polaco y del espíritu que las anima.
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Suscríbase al boletín de VenLExplicó que la obra más importante es el Centro Juan Pablo II para la promoción de la vida de Legionowo, inaugurado en 2006, dado que dentro opera la Casa para madres solteras con sus hijos. «Damos la bienvenida a la casa a todas las mujeres en dificultades, incluso a las que aún están embarazadas, porque un niño lo es desde la concepción. También damos la bienvenida a las niñas que estuvieron en un orfanato o en una familia de acogida, pero que quieren ser independientes», afirmó la hermana Laura.
Las religiosas, con la ayuda de personal laico, organizan veces 3 al año talleres de arte, música, bordado y decoupage, además de ofrecer la oportunidad de aprender y ampliar sus habilidades. Desde hace 11 años, en Legionowo funciona también una Cuna de la Vida, gracias al que fue posible rescatar a una niña dejada allí. Las hermanas de Legionowo también gestionan una guardería católica y un consultorio psicológico.
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