Francisco precisó que «vemos tristemente que la persecución de cristianos continúa», en el Ángelus del día en el que la Iglesia católica recuerda al primer mártir de la historia, san Esteban. El Papa animó a rezar por las comunidades cristianas que sufren discriminación o incluso persecución en el mundo a causa de su fe.
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Suscríbase al boletín de VenL«Hoy, 2.000 años después, vemos tristemente que la persecución continúa: hay persecución de cristianos… sigue habiendo —y son muchos— quienes sufren y mueren por dar testimonio de Jesús, como también hay quienes son penalizados a diversos niveles por comportarse de forma coherente con el Evangelio, y quienes luchan cada día por mantenerse fieles, sin aspavientos, a sus buenos deberes, mientras el mundo se ríe de ellos y predica otra cosa», aseguró.
El Pontífice manifestó su «cercanía a las comunidades que sufren discriminaciones» y las exhortó «a perseverar en la caridad hacia todos, luchando pacíficamente por la justicia y la libertad religiosa». Al reflexionar sobre el pasaje de los Hechos de los Apóstoles, enfatizó que san Esteban no puede dejar de dar testimonio de «su fe en Jesús».
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