El custodio de Tierra Santa, Francesco Patton, anima a ayudar en la Colecta de Viernes Santo, que este año es el 15 de abril próximo, tras reiterar que los franciscanos en los Santos Lugares continuaron con su misión «en una situación sin precedentes como la que vivimos en estos últimos años», tras las restricciones y confinamientos que se establecieron por la pandemia de COVID-19. La colecta se convierte en este tiempo en la mayor ayuda para los cristianos en Tierra Santa.
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«Nosotros franciscanos de la Custodia de Tierra Santa continuamos nuestra misión: en los santuarios sin peregrinos, intensificamos la oración, dando voz al grito de toda la humanidad. En las parroquias continuamos a celebrar y a estar cerca de las personas, de los fieles locales, de los trabajadores y de los refugiados», indicó. «En las escuelas tratamos de educar en la fraternidad y en la esperanza. En los centros de estudio acogimos y formamos jóvenes frailes, y también sacerdotes, religiosos y religiosas y laicos provenientes de todo el mundo», aseguró Patton.
Explicó que se esforzaron «con dificultad por sostener materialmente las comunidades más débiles: la comunidad de Belén y la de Jerusalén, sin peregrinos y sin trabajo; las comunidades del Líbano, destrozado por una crisis económica y política siempre más gangrenosa; las comunidades de Siria, prisionera de una guerra que parece no terminar». El custodio de Tierra Santa, que anima a ayudar en la Colecta, solicitó que los recuerden «también este año el Viernes Santo» y que piensen en los hermanos que viven en los Santos Lugares. Imploró ayuda «según la generosidad del corazón, recordando las palabras del Señor Jesús: Hay más alegría en dar que en recibir (Hch. 20.35)».
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