Fieles y peregrinos celebran a san José Gabriel del Rosario Brochero, más conocido como Cura Brochero, en el santuario de Nuestra Señora del Tránsito y Santo Cura Brochero, en la provincia de Córdoba, el miércoles 16 de marzo, en el día de su fiesta litúrgica. La festividad comenzó el martes 15, con la recepción de la cabalgata y los caminantes en el atrio del santuario, donde al día siguiente hubo celebraciones de Misa durante toda la mañana.
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Suscríbase al boletín de VenLEl delegado episcopal para las Causas de los Santos, Santiago Olivera, quien fue anterior obispo de Cruz del Eje, celebró la Misa de las 10, en la capilla del santuario. Olivera, obispo castrense, animó al pronunciar la homilía a que la figura de Brochero, en esta Cuaresma, resuene en los corazones como un llamado a la conversión. «Brochero estaba seguro que el encuentro con Cristo, transformaba su curato, su pueblo, transformaba su patria, transformaba el corazón del creyente. Por lo tanto, hacía una cultura mucho más cristiana, con valores evangélicos, creciendo en la fraternidad, en la justicia y en la verdad», afirmó, tras recordar que el santo encarnó «el amor de Dios sin límite».
Homilía del obispo Olivera.
El obispo de Cruz del Eje, Ricardo Araya, presidió la Misa central por la tarde, en la que precisó la alegría del encuentro de Brochero con las personas. «Encontrarse con las personas era la alegría de Brochero. Y la otra alegría de Brochero era celebrar el sacramento de la Reconciliación: ‘Yo me felicitaría si Dios me saca de este planeta sentado confesando’», recordó el prelado, al agradecer a tantos sacerdotes que en la novena escucharon a los peregrinos. «A Brochero viene mucha gente muy distinta. Habría que decir que a Brochero viene de modo especial el pueblo sufrido de todos los tiempos», consideró.
Homilía del obispo Araya.
Araya destacó la capacidad de Brochero para acercarse a todos. «Amó, trabajó y rezó por la gente y con la gente. ¡Iba detrás, haciéndose como ellos! ‘Se hizo tan como nosotros’, decía la gente», enfatizó. «Que renovemos el gusto de haber sido llamados por Dios a ser Pueblo de hermanos, que el ejemplo e intercesión del cura gaucho lo hagan realidad en el día a día de cada familia, de cada comunidad, de esta Argentina y de este mundo que necesita juntar las manos y rezar», reflexionó. Tras finalizar la Misa central en la que celebran al Cura Brochero en Córdoba, hubo una procesión por las calles del pueblo detrás de la imagen del santo.
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