El arzobispo de San Francisco, Salvatore Cordileone, y el obispo de Oakland, Michael Barber, denunciaron la afluencia de la ideología de género que «se generalizó en la sociedad contemporánea», en una carta pastoral conjunta titulada ‘La unidad cuerpo-alma de la persona humana’. Recordaron que Francisco considera la teoría de género como «una de las colonizaciones ideológicas más peligrosas» de la actualidad.
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«La ideología de género se opone radicalmente, en muchos aspectos importantes, a una sana comprensión de la naturaleza humana, dando lugar a formas de influencia cultural, especialmente a través de la educación y la legislación, que promueven una noción de identidad personal que se deja a la elección del individuo y que niegan la base antropológica de la familia como fundada en la diferencia biológica entre el hombre y la mujer. Se opone así a la razón, a la ciencia y a una visión cristiana de la persona humana», explicaron Cordileone y Barber, en su misiva.
Los prelados precisaron que «a lo largo de su historia, la Iglesia católica se opuso a las nociones de dualismo que plantean el cuerpo y el alma como entidades separadas y no integradas». «La diferencia y la complementariedad sexual hombre-mujer son también esenciales para una comprensión cristiana de la unión conyugal, que es en sí misma una imagen de la comunión trinitaria. Eliminar esta diferencia disminuiría en el hombre y la mujer parte de lo que significa ser imagen y semejanza de Dios. Además, acabaría con la base misma de la familia, ‘primera célula vital de la sociedad’. Hacerlo sería una ofensa a la dignidad humana y una injusticia social», ratificaron los obispos de Estados Unidos.
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