El padre Pedro Fernández Vara presidió una Misa para celebrar sus 100 años de edad y 73 de presbítero. El sacerdote nació el 1 de septiembre de 1923 en la localidad de Ferreras de Abajo, en la provincia de Zamora y perteneciente a la diócesis de Astorga, en España. Siendo aún un niño, con apenas 8 años asistió en 1931 a la caída de la monarquía y la instauración de la II República española, de carácter profundamente anticlerical.
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Suscríbase al boletín de VenL«En la Misa recordé toda mi vida, todo mi trabajo pastoral», indicó el padre Pedro, tal como sostuvo la diócesis de Zamora. Fernández fue testigo del golpe de Estado de las izquierdas en 1934, la insurrección del Ejército contra el Gobierno en 1936 y la Guerra Civil, a la que sobrevivió siendo adolescente. Fue enviado a Casayo, una pequeña parroquia en la comarca de Valdeorras, en la provincia de Orense.
A lo largo de los años desempeñó su labor pastoral en diferentes ubicaciones rurales del noroeste español, como Pozuelo de Tábara, Burganes de Valverde, Mombuey y, finalmente, Micereces de Tera. En 1990, a los 67 años, se trasladó a Zamora, donde asumió algunas capellanías. Desde que llegó a la ciudad, vivió en la Residencia del Amor de Dios, donde tuvo lugar la Misa de acción de gracias. Es el sacerdote más longevo de las 2 diócesis en las que sirvió: Astorga y Zamora.
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