La Conferencia Episcopal de Ecuador, que tiene como presidente a Eugenio Arellano, y vicepresidente a Luis Cabrera, denunció abusos del nuevo Código Orgánico de Salud, por lo que le pidió al mandatario Lenín Moreno que vete los artículos que van en contra de los derechos humanos, en una declaración, el miércoles 26 de agosto. Precisó que estos se refieren a temas que atentan la objeción de conciencia, la vida humana y el rol primario de la familia dentro de la sociedad a través de la educación.
«Hacemos un firme llamado a quienes tienen responsabilidades institucionales, pidiéndoles que sitúen los derechos humanos en el centro de todas las políticas, incluidas las de cooperación para el desarrollo humano integral, aún cuando eso signifique ir contra corriente», precisó la Conferencia Episcopal de Ecuador sobre la nueva normativa referida a la salud. Los obispos de Ecuador reiteraron que el Código debe estar al servicio de la vida y los derechos humanos, lo que implica «reconocerlos, respetarlos, defenderlos, promoverlos y garantizarlos». Aseveraron que el Código Orgánico de Salud, que afecta el ejercicio de algunos derechos humanos consignados en la carta magna del país, contradice y desconoce la cultura, costumbre y principios de Ecuador, un país reconocido por su amor y defensa de la vida humana siempre.
«Los representantes de la Iglesia en Ecuador señalan que con la aprobación del Código Orgánico de salud se afecta el ejercicio de algunos derechos humanos consignados en la carta magna de los ecuatorianos. El derecho a la vida desde la concepción; al promover el aborto de una manera ambigua o indeterminada y catalogarlo como emergencia obstétrica, cuando la verdadera emergencia obstétrica se presenta cuando el aborto está en curso de manera involuntaria. El derecho de madres y padres de familia a educar a sus hijos; al aprobar el uso indiscriminado de anticonceptivos en los menores de edad sin su consentimiento. Esto impone visiones ideológicas de género contrarias a convicciones éticas y a la ciencia», explicaron los prelados.