Más de 5.000 fieles, 4 sacerdotes y religiosas asistieron a la ceremonia en la que inauguran el nuevo santuario de Sugadabadi, dedicado a la Virgen de Fátima en la diócesis de Cuttack-Bhubaneswar, en el Estado indio de Orissa, en la zona donde muchos cristianos se refugiaron en 2008 durante los pogromos en Kandhamal, que dejaron más de 100 muertos y 50.000 desplazados, el sábado 13 de mayo.
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Suscríbase al boletín de VenL«Si estamos vivos y a salvo es porque la Virgen María nos protegió de los fundamentalistas y de los que nos perseguían en 2008 y porque la Virgen es más fuerte que las amenazas de los fundamentalistas hindúes», afirmó Bijay Mallick, uno de los animadores de la novena de oración y meditación previa a la apertura. La aldea católica de Sugadabadi está formada por 120 familias que todavía llevan grabado en la memoria el drama que vivieron hace casi 15 años atrás.
El padre Pradosh Chandran Nayak, vicario general de la archidiócesis de Cuttack-Bhubaneswar, bendijo el santuario. «La celebración de la fiesta de Nuestra Señora de Fátima en el nuevo santuario pone de manifiesto nuestra profunda fe en Dios y el poder de intercesión de María», explicó Nayak.
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