La Santa Sede presenta el nuevo rito y los requisitos para instituir oficialmente catequistas en la Iglesia católica. La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina, que tiene como prefecto al arzobispo Arthur Roche, publicó una carta —junto al rito que fue presentado en latín— dirigida a los presidentes de las conferencias episcopales, en la que se precisa qué es ser catequista, las funciones que tienen, los requisitos para ser admitidos y quiénes no deberían ser admitidos en este ministerio. El rito podrá realizarse durante una Misa o una celebración de la Palabra de Dios y tendrá un esquema preciso: exhortación, invitación a la oración, texto de bendición y entrega del crucifijo. El texto del ritual entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2022.
Síganos en Telegram
Colabore con Verdad en Libertad
Suscríbase al boletín de VenLEl texto de la Congregación aseguró que los catequistas «en virtud del Bautismo, están llamados a ser corresponsables en la Iglesia local para el anuncio y la transmisión de la fe, desempeñando tal función en colaboración con los ministros ordenados y bajo su guía», después que la Santa Sede presenta nuevo rito y requisitos. «Al tener este ministerio ‘un fuerte valor vocacional que requiere el debido discernimiento por parte del Obispo’ y siendo su contenido definido por cada una de las Conferencias Episcopales —en conformidad con lo expresado en Antiquum ministerium—, no todos los que son llamados ‘catequistas’, realizando un servicio de catequesis o de colaboración pastoral, deben ser instituidos», afirmó, tras reiterar que «es tarea de las conferencias episcopales clarificar el perfil, el papel y las formas más coherentes para el ejercicio del ministerio de los catequistas en el territorio de su competencia».
La misiva indicó que no deberían ser instituidos catequistas aquellos que iniciaron «el camino hacia el Orden sagrado y, en particular, fueron admitidos como candidatos al diaconado y al presbiterado», así como también «los religiosos y religiosas —independientemente de su pertenencia a Institutos que tienen como carisma la catequesis—, a no ser que sean referentes de una comunidad parroquial o coordinadores de la actividad catequética», al enfatizar que esto se debe al carácter laical del ministerio del catequista, dado que es un servicio propio de los laicos. Aseguró que tampoco deberían ser admitidos «aquellos que enseñan religión católica en las escuelas, a menos que también desempeñen otras tareas eclesiales al servicio de la parroquia o la diócesis».
Puede interesarle: Santa Sede publica Motu Proprio que establece ministerio laical de catequista.
