El obispo de Getafe, Ginés García Beltrán, preside recientemente una vigilia por la «reevangelización de España», junto a la imagen del Corazón de Jesús, en la Basílica del Cerro de los Ángeles, Madrid, en una celebración que contó con Adoración y Eucaristía, a la que asistieron cientos de personas que se trasladaron al emblemático lugar. El prelado presidió la Misa central de la vigilia el 17 de octubre pasado, tras una Adoración donde los fieles pudieron rezar por España —incluso pudieron seguir la celebración a través de pantallas—. La iniciativa fue convocada por ‘EWTN España’. Miles de personas lo siguieron en directo o en diferido a través del canal de televisión católico.
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Suscríbase al boletín de VenL «La evangelización es el anuncio de un nombre, del único nombre que puede salvarnos, Jesucristo. No hay verdadera evangelización si el hombre no se encuentra con Cristo, si Cristo no llega hasta el corazón y lo transforma, lo cambia, lo envuelve con su amor», reflexionó, al sostener que la evangelización «no es una iniciativa humana» secundada por la Iglesia en su historia sino que «obedece al mandato misionero de Jesús». «Este mandato arraigó en nuestra tierra, España, desde los albores mismos del cristianismo, más de 20 siglos de labor evangelizadora que dieron muchos frutos de santidad, y que pedimos siga dándolos. Esta tarde rogamos por la evangelización de España, pedimos seguir en el camino de nuestros hermanos mayores, que con sencillez, audacia y perseverancia transmitieron la fe como nosotros queremos hacerlo hoy», pidió el obispo de Getafe, que preside la vigilia.
García Beltrán precisó la dificultad de anunciar el Evangelio en la sociedad actual pero definió a España como «una tierra de confesores y mártires, siempre adornada por la santidad de sus hijos» que en muchas épocas confesaron esta fe católica «no sin dificultades» e incluso «con el derramamiento de sangre de muchos de nuestros hermanos». El prelado destacó que si la Iglesia en España fue evangelizadora y mística también fue especialmente misionera. «Hijos de esta tierra llevaron el Evangelio a todos los rincones del orbe y lo siguen haciendo», aseguró, tras recordar que España también fue un país que luchó por la unidad de la Iglesia y cuya Iglesia destacó en su historia por su «comunión de fe con los sucesores del apóstol Pedro, a su persona y Magisterio».
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