Desconocidos vandalizan la catedral de la Inmaculada Concepción, en el centro de Denver, Estados Unidos, con pintadas ofensivas contra Dios y la Iglesia católica, el domingo 10 de octubre. El exterior del templo fue manchado y escrito con pintura roja brillante, también las aceras y la base de una estatua de san Juan Pablo II, realizada en recuerdo de la visita del Pontífice polaco a Denver, dado que en 1993 se alojó en la catedral. Este hecho es el último de una serie de actos de vandalismo contra edificios católicos en el estado de Colorado.
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El rector de la catedral, Samuel Morehead, precisó que alertado del vandalismo por los feligreses cuando llegaba a preparar la Misa dominical. «Fue ofensivo. Esto fue un acto de alguien que es mentalmente inestable o un verdadero acto de odio contra los católicos», consideró Morehead, pese a que todavía no se estableció el verdadero motivo de este delito vandálico. Feligreses y otros voluntarios pasaron ese día limpiando las pintadas de las puertas principales, mientras que un especialista realiza el trabajo para borrar la pintura de la piedra del templo. Un portavoz de la Policía de Denver confirmó que el departamento realiza la investigación del ataque en el que vandalizan la catedral con pintadas ofensivas.
La arquidiócesis de Denver reportó que desde febrero de 2020 al menos 25 parroquias o ubicaciones de ministerios en el norte de Colorado padecieron actos de vandalismo, destrucción de propiedad o robo. Los episodios incluyeron ventanas rotas, estatuas dañadas y desfiguradas, pintadas, intentos de incendios provocados, daños en vehículos, artículos religiosos robados y otros allanamientos y robos. Hubo más de 10 incidentes en los últimos 6 meses.
En inglés.
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