La subsecretaria del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, Gabriella Gambino, volvió a pedir la prohibición de vientres de alquiler, durante su exposición en el Palacio de las Naciones de Ginebra, en un encuentro organizado por la Misión Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Ginebra y la fundación ‘Caritas in Veritate’.
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Gambino se refirió a la necesidad de una planificación internacional para proteger a las mujeres y los niños de todas las formas de explotación. Aseveró que el vientre de alquiler implica «una grave violación de la dignidad y de los derechos de las mujeres y de los niños», y la comunidad internacional «debe sentirse llamada a reflexionar sobre la urgencia de prohibir absolutamente todas las formas de gestación subrogada».
Aseguró en el encuentro ‘¿A qué precio? Hacia la abolición de la gestación subrogada: prevenir la explotación y la mercantilización de mujeres y niños’ que hay a nivel mundial un consenso en torno a «una visión fuertemente negativa de la gestación subrogada, incluso desde diferentes posiciones políticas, éticas y religiosas».
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