Un tribunal del estado brasileño de Sao Paulo prohibió citar pasajes de la Biblia durante las reuniones del concejo municipal de la ciudad de Bauru, que tiene unos 400.000 habitantes. La religión dominante allí es el cristianismo, seguido por más del 87% población local.
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Dictaminó que citar las Sagradas Escrituras, que hasta entonces era común en el ayuntamiento, al considerar que esta práctica supuestamente era contraria a la naturaleza secular del estado brasileño. El tribunal estatal también prohibió el uso de una invocación a Dios, para implorar la protección a la Providencia, durante las sesiones del ayuntamiento.
Estableció que no se puede llevar adelante la práctica anterior de colocar un ejemplar de la Biblia en la mesa donde se celebran las sesiones del ayuntamiento de Bauru. Algunos comentaristas aseguraron que la decisión del tribunal de Sao Paulo «no tiene precedentes» y puede ser difícil de aceptar en un país que «es considerado uno de los más religiosos del mundo».
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