SANTA BEATRIZ DE SILVA, VIRGEN.
Por Juan María Gallardo.
Fiesta: 17 de agosto.
Santa Beatriz de Silva nació en Ceuta, cuando Ceuta pertenecía a Portugal. Subía con frecuencia al monte Hacho, a venerar a Nuestra Señora de África, pues desde muy niña sintió gran veneración a la Inmaculada Concepción. Tenía diez años cuando su padre fue trasladado a Portugal.
Síganos en el canal de WhatsApp
Colabore con Verdad en Libertad
En 1447 Juan II de Castilla contrae segundas nupcias con Isabel de Portugal. Isabel se trajo a su dama predilecta, Beatriz. La Corte no tenía lugar fijo. A veces residía en Madrigal de las Altas Torres, donde pronto nacería Isabel la Católica. Otras veces residía en Tordesillas. Allí, en el monasterio de Santa Clara, se dedicaba Beatriz a la oración. Todo lo iba a necesitar en aquel ambiente cortesano de intrigas y recelos.
Beatriz, por su rara belleza, se daba cuenta que empezaba a ser motivo involuntario de rivalidades y celos entre sus apasionados pretendientes. Los testimonios son numerosos. «Por su gran hermosura fue demandada por muchos condes y duques en matrimonio. Había acaloradas disputas y lances de amor por su causa». Beatriz se refugia en el silencio y la oración «y de voluntad trocara su beldad por la fealdad de la mujer más fea del mundo». Tirso de Molina trazó muy bien estas intrigas.
SANTA BEATRIZ DE SILVA, VIRGEN.