La Conferencia de Obispos Católicos de África Meridional (SACBC) repudió el asesinato del padre Paul Tatu, de 45 años, religioso de la Congregación de los Sagrados Estigmas de Nuestro Señor Jesucristo de la Provincia del Santísimo Redentor, en Pretoria, quien fue masacrado recientemente a tiros por agresores desconocidos.
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«Estamos profundamente entristecidos por la trágica muerte del padre Paul Tatu, un sacerdote muy dedicado, que estaba destinado en Pretoria», sostuvo Sithembele Sipuka, presidente de la SACBC, en respuesta a la noticia del asesinato del presbítero religioso estigmatino. El comunicado de los prelados no reveló las circunstancias del asesinato, pero denunció el aumento de la violencia en el país de África Austral.
Sipuka aseveró que «la muerte de Tatu no es un incidente aislado sino más bien un reflejo angustioso del deterioro de la seguridad y la moralidad en Sudáfrica». «Ante la escalada de violencia es crucial que recordemos la santidad de la vida», reiteró. El padre Paul había trabajado en la oficina de comunicación de la Conferencia Episcopal del país y también completaba cursos de periodismo en la universidad.
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