Desconocidos profanaron la iglesia católica de Saint Paulinus Syracuse, en Nebraska, Estados Unidos, tras derribar el altar del templo, destruir una estatua del Sagrado Corazón de Jesús y dañar varios objetos, tal como lo descubrió su párroco, el padre Ryan Salisbury, el sábado 1 de abril por la mañana.
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«De alguna manera, en la providencia del Señor, esto fue permitido», precisó el padre Ryan, el lunes 3 de abril. «Sucedió en la Semana Santa de Nuestro Señor. Su propio viaje estuvo marcado por la injusticia, por el destrozo y por el daño causado a su propio Cuerpo, y eso se permitió que sucediera aquí en Syracuse de alguna manera», aseguró. Salisbury explicó que el daño asciende a unos 5.000 dólares, debido a que la estatua del Sagrado Corazón recibió daños irreparables.
El presbítero indicó que fueron estropeados los candelabros y el altar. El sagrario y la Eucaristía permanecieron intactos. Actualmente, la policía está investigando el crimen, que no fue capturado en video. «En la propia Semana Santa de Nuestro Señor, cuando le sucedieron estas cosas, su oración fue: ‘Padre, perdónalos, no saben lo que hacen’. Esa es nuestra oración como parroquia», enfatizó.
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