Mojdeh Falahi, cuyas 2 hermanas mayores fueron arrestadas hace 5 años por sus actividades cristianas, es otra cristiana conversa detenida hace 2 semanas en la ciudad sureña de Shiraz, en un centro de detención perteneciente al Ministerio de Inteligencia de Irán. Desde el arresto reciente de la mujer, de 36 años, no se supo nada más de ella. En Irán, un país de mayoría musulmana, abandonar el islam y convertirse a la fe cristiana es un delito y los cristianos descubiertos pueden padecer prisión y tortura.
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Suscríbase al boletín de VenLArtículo 18, una organización que monitorea la persecución en todo el mundo, precisó que una fuente conocedora del caso reveló que Mojdeh, que es peluquera, había asistido a la fiscalía alrededor de la hora del almuerzo a petición de un amigo cristiano, detenido el día anterior, para facilitarle algunos documentos necesarios para su liberación. Una vez que llegó, fue arrestada el 9 de septiembre pasado y ahora se encuentra detenida por cargos presentados de «cristianismo» y «actividades cristianas ilegales». «Mojdeh es cristiana desde hace años, aunque sus actividades nunca fueron extensas», explicó.
La familia de Mojdeh vistió la fiscalía varias veces desde su arresto y solicitó verla, pero no se les permitió. A Mojdeh tampoco se le concedió el acceso a un abogado. Las hermanas de Mojdeh, Maryam y Marjan, formaban parte de un grupo de 8 cristianos conversos arrestados en Bushehr, 300 kilómetros al oeste de Shiraz, en julio de 2019. El director de Article18, Mansour Borji, indicó que «la madre de Mojdeh, que ahora tiene 60 años, quedó profundamente traumatizada después de soportar el arresto hace 5 años de 2 de sus hijas por su fe cristiana».
«Nunca se recuperó del todo del dolor y la angustia de su detención, y ahora se ve obligada a revivir esa pesadilla después del arresto de su tercera hija. Lo que las autoridades iraníes no reconocen es que cada detención que realizan destroza no sólo una vida, sino familias enteras. Cada acto de crueldad repercute en generaciones y deja cicatrices que quizá nunca se curen, simplemente por el compromiso de estas personas con su fe cristiana», denunció Borji.
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