Los obispos de Ecuador fomentan recientemente la devoción a santa Gianna Beretta, en la solemnidad de Todos los Santos, al celebrar una Misa por los no nacidos. Este año, la Iglesia católica celebra los 100 años del nacimiento de santa Gianna Beretta, una médica pediatra y laica católica italiana, que falleció prematuramente de un cáncer uterino, al preferir salvar la vida de su hija aún no nacida antes que la suya. La Misa por los no nacidos, actividad anual arquidiocesana desde 2019, permitió dar cristiana sepultura a más de 100 bebés no nacidos.
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La arquidiócesis de Guayaquil celebró una Misa por los no nacidos, en coordinación con la Junta de Beneficencia de la ciudad, el 1 de noviembre pasado, en el Panteón Metropolitano, a pesar de los atentados que sufrió el país en la madrugada de ese mismo día. En la celebración se dio cristiana sepultura de los restos de nonatos, en el mausoleo que donó el Panteón Metropolitano de la Junta de Beneficencia para la sepultura de no nacidos de familias vulnerables para honrar la vida de los bebés fallecidos por diversos motivos en etapa prenatal y neonatal.
El obispo auxiliar y coordinador de la pastoral Vida y Familia de la arquidiócesis de Guayaquil, Gerardo Nieves, presidió la Eucaristía, acompañado por el obispo auxiliar Gustavo Rosales, y el obispo emérito de Daule, Giovanni Piccioli, junto a 8 sacerdotes de la ciudad. La celebración, en la que los obispos de Ecuador fomentan la devoción a santa Gianna Beretta, contó con la presencia de la ‘Campana La Voz’ de los no nacidos, símbolo provida enviado por el Papa Francisco a Ecuador. Nieves invitó durante la homilía a defender la vida y vivir sin miedo frente a lo que sucede en el país, al reiterar que la salvación viene del Señor.
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