Los obispos de la Conferencia Episcopal de Birmania, que está presidida por el cardenal Charles Maung Bo, piden a las autoridades que «los lugares de oración no sean atacados y que se proteja a las personas que buscan refugio en ellos», además de exigir que respeten los corredores humanitarios para que los civiles puedan huir de los lugares asolados por la violencia, en una nota conjunta. Los prelados, que también convocan a la oración a los católicos, realizaron un nuevo llamamiento tras un bombardeo del Ejército en la diócesis de Loikaw, en el estado de Kayah, que afectó a 4 iglesias, causó varios muertos y empujó a miles de personas a refugiarse en los bosques.
Colabore con Verdad en Libertad
«Mientras nuestro país atraviesa tiempos difíciles, hacemos este llamamiento por motivos humanitarios. No somos políticos, somos líderes de comunidades religiosas que acompañan a nuestra gente en su camino hacia la dignidad humana», reiteraron, al solicitar «corredores humanitarios para ingresar a las zonas de conflicto». «Miles de nuestros habitantes, especialmente los ancianos y los niños, se están muriendo de hambre en la selva. La muerte de personas inocentes, por inanición, es la experiencia más desgarradora. Imploramos encarecidamente que se habiliten corredores humanitarios para llegar a las masas hambrientas dondequiera que estén. Son nuestros ciudadanos y tienen derechos esenciales: a la alimentación y la seguridad», precisaron, en el llamamiento firmado por los obispos de Birmania.
Los obispos de Birmania exigieron «respetar el derecho de asilo y la santidad de los lugares de oración». «En el reciente conflicto, miles de personas buscaron resguardarse en las iglesias. 4 iglesias de Loikaw fueron atacadas y miles de personas huyeron a la selva. Por favor, respeten las normas internacionales de asilo en tiempos de guerra: las iglesias, pagodas, monasterios, mezquitas, templos, incluidas las escuelas y los hospitales, están reconocidos como lugares neutrales de refugio durante los conflictos. Pedimos que estos lugares no sean atacados y que se proteja a las personas que buscan refugio en ellos», precisaron. Aunque los líderes del Ejército prometieron preservar los lugares de culto, en las últimas semanas atacaron la iglesia de María Reina de la Paz, en Daw Ngan Kha, la de Kayan Thaya, la de San José en Demoso y la del Sagrado Corazón en Kayantharyar.
Puede interesarles: Ejército birmano vuelve a atacar una iglesia católica.