El nuevo informe del Centro Europeo para la Ley y la Justicia (ECLJ) reveló que islamistas reprimen con campañas de intimidación a conversos al cristianismo, al precisar los peligros de abandonar el islamismo para abrazar el cristianismo en Francia y en Europa. El documento, que fue presentado a inicios de julio y titulado ‘La persecución de los cristianos ex-musulmanes en Francia y en Europa’, aseguró que «hoy en Francia, es al menos difícil y más generalmente peligroso para un musulmán dejar su religión».
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Suscríbase al boletín de VenL«La gran mayoría de las personas que abandonan el islam para unirse al cristianismo experimentan persecución familiar y comunitaria que varía mucho en intensidad, desde el desprecio hasta la violencia. La persecución es en primer lugar intrafamiliar —padres, cónyuge, hermanos, primos, etc.—; luego es comunitaria. Tiene lugar en la vida real pero también en las redes sociales donde los islamistas están muy presentes y activos», afirmó. «Algunos islamistas llevan a cabo campañas de intimidación y de inteligencia para buscar y reprimir a los conversos. Por lo tanto, puede suceder que un converso sea descubierto y amenazado, agredido o incluso asesinado por un islamista al que ni siquiera conocía», explicó el documento, tras precisar que al no estar vigente la ley de la sharia, activa en países de mayoría islámica como Pakistán, «la persecución no tiene fuente legal en Francia».
En inglés.
Afirmó que los hechos de violencia «van desde el desprecio y la agresión verbal» al converso «cuando anuncia la conversión» y expulsión de la familia, hasta casos de matrimonio forzado de menores, linchamientos públicos e incluso asesinatos. «Hay una gradación en la reacción. La mayoría de los musulmanes reaccionan generalmente con una sanción de ‘muerte social’. Más raramente, islamistas como los salafistas o los Hermanos Musulmanes buscarán ‘lavar’ el escándalo provocado por el converso y aplicarán una persecución más radical», enfatizó. El documento, que revela que islamistas reprimen a conversos al cristianismo, sostuvo que esta situación de persecución podría afectar actualmente hasta 30.000 personas solamente en Francia, e indicó que «alrededor de 300 personas de origen musulmán reciben el bautismo en la Iglesia Católica cada año».
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