Maksym Ryabukha, nuevo obispo greco-católico del exarcado de Donetsk, precisó que la Iglesia en Ucrania perdió la mitad de sus parroquias en las regiones que fueron ocupadas, a más de 2 años y medio de la invasión rusa, en recientes declaraciones brindadas al diario italiano Avvenire.
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Suscríbase al boletín de VenLEl prelado indicó que «la situación es siempre más preocupante» desde que comenzó la invasión en febrero de 2022. «Ya perdimos más de la mitad de las parroquias. Y, con el ejército ruso que avanza, otras decenas de iglesias fueron evacuadas», precisó Ryabukha, cuya diócesis quedó dividida. En las iglesias de Pokrovsk, Mirnohrad y Kostiantynivka, zonas tomadas por las fuerzas rusas, ya no quedan muebles ni adornos sagrados.
«Los sacerdotes permanecen cerca de la población y visitan a los refugiados que abandonaron sus hogares», enfatizó. «En las zonas ocupadas por Rusia, quienes se dicen abiertamente católicos desaparecen: a algunos los fusilan; otros son encarcelados. No se tiene el derecho a profesar libremente la fe. Nuestros fieles repiten: ‘Resistimos, pero es como estar encerrados en una prisión’», aseguró.
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