EL REINO DE DIOS ESTÁ DENTRO DE VOSOTROS.

Por Mario Ortega.

Lc 17, 20-25. El Reino de Dios está dentro de vosotros. Jueves semana XXXII del TO

En aquel tiempo, a unos fariseos que le preguntaban cuándo iba a llegar el reino de Dios, Jesús les contestó:

– El reino de Dios no vendrá espectacularmente, ni anunciarán que está aquí o está allí; porque mirad, el reino de Dios está dentro de vosotros.

Dijo a sus discípulos:

– Llegará un tiempo en que desearéis vivir un día con el Hijo del Hombre, y no podréis.
Si os dicen que está aquí o está allí, no os vayáis detrás. Como el fulgor del relámpago brilla de un horizonte a otro, así será el Hijo del Hombre en su día. Pero antes tiene que padecer mucho y ser reprobado por esta generación.

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El Reino de Dios está dentro de vosotros

  1. Unos fariseos le preguntan a Jesús cuándo va a llegar el Reino de Dios, es decir, el Mesías prometido. Ellos esperaban que llegara de un modo llamativo y espectacular, a la medida de su propia imaginación. Jesús les contesta de modo misterioso y claro al mismo tiempo: El Reino de Dios está en medio de vosotros. Es decir, está declarando que el Reino de Dios ha llegado con Él, que es el Salvador esperado. Los fariseos se imaginaban un futuro con Dios; Jesús les anuncia un presente de Dios en medio de ellos.
  2. El Reino de Dios, o sea Dios, está en medio de vosotros; dentro de vosotros, también se puede traducir. Y esta revelación fundamental de Jesús también responde a nuestras propias inquietudes. Cuántas veces esperamos que Dios venga por no sabemos muy bien qué caminos extraordinarios o espectaculares en nuestra vida. Por una luz esplendorosa o experiencia definitiva que nos convenza de la presencia de Dios. Y Jesús nos dice hoy: no, no esperes esto. Dios está en medio de ti, dentro de ti. 
  3. Está dentro del alma, por la gracia santificante, está dentro de mí desde el bautismo, está dentro de cada uno de nosotros en la vida ordinaria. Lo encuentro dentro de mi corazón cuando hablo con él en la oración y cuando lo recibo cada día en la Eucaristía.

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